Uno de los presuntos autores del crimen de Gabriel Izzo, el comerciante asesinado el 9 de junio último en la localidad bonaerense de San Antonio de Padua durante un robo en el que su esposa resultó gravemente herida, y quien tras ser detenido por el hecho se había fugado a fines de agosto de una comisaría de Merlo, fue capturado esta mañana tras permanecer 80 días prófugo, con un DNI falso y dinero con el que planeaba fugarse a Brasil, informaron fuentes policiales y judiciales.
La detención del hombre, identificado como Brígido Ricardo Achucarro González (32), de nacionalidad paraguaya, y por quien el Ministerio de Seguridad bonaerense había ofrecido una recompensa de hasta dos millones de pesos, fue concretada alrededor de las 6 de hoy por detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Morón, en conjunto con personal policial de la comisaría segunda de Merlo, en una pensión ubicada sobre la calle Carlos Gardel al 700, en la localidad bonaerense de Loma Hermosa, partido de Tres de Febrero.
Según informaron los voceros a Télam, Achucarro González está sindicado por los investigadores como el autor material del crimen de Izzo (60), asesinado durante un robo llevado a cabo el 9 de junio pasado por cinco delincuentes en su vivienda de la localidad dicha del partido bonaerense de Merlo, en un hecho donde su mujer, Silvana Petinari, resultó gravemente herida tras ser golpeada y apuñalada en su ojo derecho, el cual lo perdió.
Según las fuentes, el ahora recapturado fue encontrado en la mencionada pensión junto a su novia -quien no fue detenida ya que no está implicada en el crimen-, y en poder del imputado se le secuestró un documento falso con la identidad de “Víctor Ramón Alomo” y una suma importante de dinero en pesos.
De acuerdo a la investigación, usando esa falsa identidad y con el dinero, Achucarro González planeaba escaparse al país vecino de Brasil.
El sospechoso pudo ser localizado gracias a la “apertura de antenas de teléfonos celulares” donde se comprobaron “llamados de su entorno familiar”, dijo a Télam una fuente judicial.
Por su parte, el fiscal a cargo de la causa, Claudio Oviedo, de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio (UFIJ) 5 de Morón, pidió al Juzgado de Garantías 2 del mismo departamento judicial, que Achucarro González sea trasladado a una cárcel del Servicio Penitenciaria Bonaerense (SPB), debido a que ya se fugó de una comisaría.
Justamente, tras ser detenido el 13 de julio último por el crimen de Izzo, el imputado paraguayo había logrado fugarse, junto a otros tres presos, el pasado 28 de agosto de la comisaría de la localidad de Parque San Martín, partido de Merlo.
Por el crimen del empresario, todavía hay dos prófugos; Diego Eduardo Correa (25) y Víctor Ricardo Martín Fernández Galarza (30), por los cuales también el Ministerio de Seguridad bonaerense ofreció recompensas de hasta dos millones de pesos, para quien aporten datos que permitan localizarlos y detenerlos.
A su vez, fuentes judiciales contaron que los pesquisas sospechan que los prófugos están relacionados a las barras bravas del Club Atlético Excursionistas y Sacachispas Fútbol Club.
Por su parte, Adolfo Petinari, el hermano de Silvana Petinari y yerno de Izzo, dijo en diálogo con Télam que la familia “está enterada de la recaptura del fugado” y que solo siguen “pidiendo Justicia”.
A su vez, señaló que los fiscales “están avanzando en el caso” y contó que su hermana, en su recuperación, tiene “días buenos y malos” pero psicológicamente “está muy mal”.
El crimen de Izzo fue cometido el viernes 9 de junio a las 4.20 en una casa de la calle Italia al 1000, a pocas cuadras de la estación de trenes de San Antonio de Padua, donde el comerciante y dueño de un aserradero, vivía con su esposa Susana Petinari, hija del propietario de una empresa dedicada a la fabricación de acoplados, volcaduras y semirremolques en Merlo.
De acuerdo a la pesquisa, al menos cinco delincuentes llegaron hasta el domicilio a bordo de un Gol gris y cuatro de ellos forzaron una persiana de madera tipo americana de la casa e ingresaron, tras lo cual sorprendieron al matrimonio.
Otros dos, en tanto, se quedaron en el auto y en la vereda, por lo que todos ellos fueron captados por las cámaras de seguridad del barrio.
Según las fuentes, Izzo se despertó al escuchar ruidos y agarró dos armas de su propiedad que guardaba en su habitación -una pistola Bersa calibre .40 y un revólver .38-, con la que salió de la habitación para ver qué sucedía.
En esas circunstancias, se enfrentó con los delincuentes, quienes le dispararon y además lo apuñalaron.
La víctima también disparó, aunque sólo con el revólver, ya que la pistola se le trabó y aparentemente no alcanzó a herir a nadie, añadieron los voceros.
Izzo fue impactado por cuatro proyectiles y murió en el lugar a raíz de las lesiones de bala y también de arma blanca que los delincuentes le provocaron, mientras que su esposa fue apuñalada, golpeada, perdió un ojo y estuvo internada 18 días.
En la vivienda también se encontraba la madre de la mujer herida, Elsa Otruba de Petinari (83), quien resultó ilesa ya que no salió de la habitación.
Días después del crimen, fue detenido Walter Rodríguez Sierra (53), apodado “El Uruguayo”, quien era el dueño del Volkswagen Gol que fue utilizado para cometer el hecho y ahora se encuentra bajo arresto domiciliario; Gustavo Mac Dougall (49) y el ahora recapturado Achucarro González (30).
Fuente Télam