El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, llegó hoy a China en un viaje oficial para reunirse mañana con el presidente Xi Jinping y discutir sobre la relación bilateral, inversiones y la guerra en Ucrania, sobre la cual sus países tiene visiones distintas.
Ante el nuevo premier chino Li Qiang en un foro económico en el sur de China, Sánchez condenó la invasión rusa de Ucrania y elogió los esfuerzos diplomáticos del país asiático, que el mes pasado presentó una propuesta para poner fin a la guerra.
“La humanidad se enfrenta a desafíos globales de una escala sin precedentes: la emergencia climática, la pandemia y la agresión brutal e ilegal de Rusia contra Ucrania”, dijo Sánchez.
“Es esencial reconstruir la confianza a través del diálogo, la solidaridad y la cooperación”, prosiguió el mandatario en el foro de la ciudad de Boao, en la isla de Hainan, en el comienzo de su visita oficial a China.
Sánchez tiene previsto reunirse mañana en Beijing con Xi, que fue reelecto este mes para un tercer mandato como presidente, algo inédito en China.
El mandatario español es el segundo líder de un país de la Unión Europea (UE) en viajar a China desde el inicio de la pandemia de coronavirus y el primero en hacerlo desde que Beijing presentó su propuesta política para resolver la guerra en Ucrania.
La semana pasada, Xi abordó el tema con Vladimir Putin en una cumbre celebrada en Moscú, en la que el presidente ruso se manifestó abierto a negociar con Ucrania, tras elogiar la propuesta china.
Si bien Estados Unidos e incluso la UE se han mostrado reticentes al plan, Sánchez elogió los esfuerzos diplomáticos de China, que también medió para la reciente reanudación de relaciones entre Irán y Arabia Saudita.
“Celebro la intensificación de los contactos diplomáticos de las autoridades chinas con líderes de todo el mundo. Refleja un alto grado de responsabilidad”, dijo.
El pasado viernes, el dirigente español había resaltado que la voz de China “debe ser escuchada para ver si podemos poner fin a esta guerra”.
España, que es miembro de la OTAN, ha condenado la invasión rusa de Ucrania y anunciado la entrega de tanques a Kiev. También participa de las sanciones impuestas a Rusia por la UE por la invasión.
China no ha condenado la invasión rusa de Ucrania, no avala las sanciones contra Rusia ni la entrega de armas a Kiev. Al mismo tiempo, trata de presentarse como un mediador neutral.
El plan de paz presentado por China pide una tregua en Ucrania seguida de negociaciones políticas, pero no exige la retirada de las tropas rusas de las zonas ucranianas que ocupan. Estados Unidos dice que el plan es parcial a favor de Rusia.
La UE también ha tomado el plan chino con recelo.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que visitará China la semana próxima, dijo hoy que la postura de China sobre la guerra de Ucrania será decisiva en el futuro de su relación con la UE.
“Debemos ser francos. La forma en que China siga interactuando con la guerra de Putin será un factor determinante para el futuro de las relaciones de la UE y China”, dijo Von der Leyen antes de su viaje a China con el presidente francés, Emmanuel Macron.
Sánchez, que viene de participar en una cumbre europea en Bruselas y en la Cumbre Iberoamericana en República Dominicana, aseguró que en todos estos encuentros escuchó “el mismo anhelo por la paz, la estabilidad y la prosperidad”.
“Nadie quiere fragmentación económica o la guerra”, aseguró.
Aunque la invitación de Xi responde al 50º aniversario del establecimiento de relaciones bilaterales, Sánchez dijo la semana pasada que uno de los objetivos del viaje era intercambiar opiniones sobre la situación en Ucrania.
En Hainan, abogó también por la cooperación entre China y la UE y aseguró que sus relaciones “no tienen por qué ser beligerantes”, informó la agencia de noticias AFP.
El español lanzó un discurso contra el proteccionismo y reclamó a los chinos abrirse a las inversiones europeas, para evitar así que, como reacción a su cierre, el bloque también se proteja cerrándose a las inversiones chinas, una de las principales quejas de Beijing en la economía pospandemia.
Sin embargo, advirtió que continuarán “defendiendo los valores, principios y puntos de vista europeos”.
“No cederemos en esto”, dijo.
Fuente Télam