La Dirección General de Aduanas frenó exportaciones por un total de 121.000 kilogramos de ajo, en operativos en rutas con destino a Brasil y a Chile, cuyo valor ronda los 100.000 dólares, se informó hoy oficialmente.
El organismo que dirige Guillermo Michel advirtió que los proveedores no tenían capacidades de producción consistentes con los volúmenes de ajo que pretendían exportar.
Atento a la trazabilidad de la mercadería, Aduana les requirió que presentaran la debida documentación para justificar su legal tenencia de la misma y dado que no fueron capaces de hacerlo, resolvió la interdicción de la carga que se encontraba en zonas primarias aduaneras, concretamente, en depósitos fiscales en la provincia de Mendoza y en el Resguardo Paso de la Barca en Misiones.
De esta forma, la Aduana denunció penalmente tanto a los operadores como a los auxiliares de comercio exterior de las maniobras. Asimismo, “considera probable que la intención final de las mismas también fuera no liquidar las divisas de las exportaciones”, consideraron desde la cartera de Michel.
Las maniobras se ajustan a un perfil de riesgo que la Aduana viene elaborando, en forma conjunta con la DGI, en relación con las exportaciones de ajo.
En relación a esto, en la Aduana explicaron que “el mismo consiste en operadores que adquieren la mercadería en efectivo, en grandes cantidades, en el mercado informal; la exportan mediante proveedores sin una capacidad acorde a ese volumen y luego, con la mercadería ya colocada en el exterior, evaden la debida liquidación de divisas en la Argentina”.
En este sentido, en un caso sumamente reciente, la Aduana denunció a un operador brasileño que presentó notas de crédito de dudosa legitimidad para justificar la falta de ingreso de divisas en una exportación de 156.000 dólares a su país de origen.
El operador no contaba con un solo empleado en relación de dependencia, con lo que el organismo está investigando, en conjunto con la Embajada Argentina en Brasil en manos de Daniel Scioli, a la red de personas que, desde ese país, puede haber colaborado con su conciudadano, el ejecutor de la maniobra en nuestro país”, detallaron.
Asimismo, en casos que la Dirección General de Aduanas dio a conocer unos meses atrás, expuso que otros exportadores estaban apelando a la creación de empresas fantasma para colocar ajo en Brasil, contando con que, luego de no liquidar los dólares recibidos, serían inhibidas por la Dirección General de
Por último, al igual que en las fallidas exportaciones a Brasil, la Aduana frenó una operación de 24.000 kg de ajo con el país trasandino como destino, dado que el proveedor no pudo justificar la tenencia de la mercadería. Tampoco acreditaba una capacidad de producción acorde al volumen de la venta, de 2.400 cajas de 10 kg cada una.
El organismo que dirige Guillermo Michel resolvió la interdicción de la carga, que se encontraba arriba de un camión de patente argentina en el depósito General Multimodal, provincia de Mendoza, precisaron desde dicha dependencia.