Los acuerdos firmados entre Argentina y Brasil para potenciar la cooperación en materia de investigación y tecnología industrial en sectores estratégicos, tienen como objetivo “exportar conocimiento y generar valor agregado a materias primas y recursos naturales” para “producir un cambio en la matriz productiva”, afirmó a Télam Karina Pombo, Directora Nacional de Promoción de la Política Científica del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación.
Esta semana, el titular de esa cartera Daniel Filmus y su par de Brasil, Luciana Barbosa de Oliveira Santos, relanzaron el Programa Binacional Brasileño-Argentino en Ciencia, Tecnología e Innovación, en el marco de la visita al país del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
“El objetivo es exportar conocimiento. Buscamos generar valor agregado a las materias primas y a los recursos naturales, y producir un cambio en la matriz productiva”, sostuvo Pombo, quien añadió que “esto nos dejaría de plantear como país exportador de materias primas”.
Para avanzar con el Programa, que busca potenciar las bases de la cooperación en áreas prioritarias en materia de ciencia, tecnología e innovación, la funcionaria destacó “los recursos humanos” con los que cuenta Argentina.
“Nosotros trabajamos con el programa Raíces que no es sólo de repatriación, sino de vinculación de argentinos en el exterior: tenemos más de 20 redes de científicos que suman más de 6.000 investigadores que colaboran desde el país donde están radicados con el sistema científico argentino”, sostuvo.
Explicó que biotecnología industrial, uno de los ejes centrales de los acuerdos, se refiere a la “tecnología aplicada junto con empresas de base tecnológica para potenciar conocimientos y avances, y trabajar en conjunto con el sector productivo”.
Como ejemplo, la funcionaria señaló que la pandemia de coronavirus mostró cómo “se puede articular de manera rápida los sectores tecnológicos, científicos, productivos para la vacuna y otros desarrollos como los test”.
El relanzamiento del Programa fue posible gracias a que “los equipos técnicos de ambos ministerios durante la gestión del expresidente Bolsonaro (Jair) pudimos mantener la agenda, aunque obviamente no con la intensidad con la que esperamos trabajarla ahora”.
“Sabiendo que había ganado Lula y que iba a haber un cambio en la relación entre los dos países, preparamos a fines del año pasado un programa de cooperación en el marco de un acuerdo que teníamos firmado desde 2003 entre los dos ministerios”, destacó la encargada de Asuntos Internacionales de la cartera de Ciencia.
A 10 días de la asunción de la ministra de Brasil fueron firmados en Casa Rosada el Programa y el Memorando de entendimiento en Cooperación Científica en Ciencia Oceánica que tendrá una duración de cinco años, con renovación automática.
“Identificamos las instituciones que trabajan en las distintas áreas. Por ejemplo, en biotecnología potenciamos toda la actividad y establecimos una agenda de trabajo en el marco del Centro Latinoamericano en Biotecnología (Cabbio)”.
Pombo sostuvo que la meta en ese centro que viene trabajando hace 30 años en formación de recursos humanos, cursos para investigadores y financiación para proyectos “es que empiece a trabajar en biotecnología industrial” con la participación del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) por el lado argentino.
Con respecto al Cabbio, que funciona en Argentina, Brasil y Uruguay y trabaja con instituciones y universidades de esos países integrantes, indicó que en los “próximos meses se sumarán Perú, Paraguay y Colombia”.
En relación al presupuesto del Centro, precisó que “en cada área hay una partida que se ejecuta y destina a la implementación del programa, como por ejemplo Conae o el INTI cuando comience a trabajar en el Cabbio”.
En relación a la cooperación en ciencias espaciales, el objetivo de Argentina es ofrecer servicios de desarrollo e imágenes satelitales a Brasil y realizar lanzamientos de satélites entre los dos países, como así también “establecer una base en el sur” para no “depender de las bases en Estados Unidos”.
“Argentina y Brasil están pensando en construir una base de lanzamiento de satélites. Este tema lo está manejando la Comisión Nacional de Asuntos Espaciales (Conae)”, adelantó la funcionaria y remarcó el trabajo que se lleva a cabo para el lanzamiento de “un satélite meteorológico regional” para que ambos países “sean referentes regionales en el tema espacial. Buscamos soberanía en esta cuestión”.
Por otro lado, el Memorándum busca potenciar “desde el programa Pampa Azul (iniciativa interministerial que articula investigación científica y desarrollo tecnológico) todos los recursos marítimos y oceánicos a través de la investigación. No sólo a nivel productivo, sino también en relación al medioambiente, energías renovables, procesamientos de residuos y materiales de construcción”, aseguró Pombo.
“Argentina tiene un potencial enorme, sobre todo en Ushuaia, en temas oceánicos con el Centro Austral de Investigaciones Científicas del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Cadic) del Conicet. Queremos que la ciudad sea también un centro de investigación oceánica para el mundo”, subrayó.
Pombo recordó que cuando asumió al frente del Ministerio de Ciencia Roberto Salvarezza, su gestión reflotó “el Centro Argentino Brasileño de Nanotecnología (CABN) que estaba dormido desde hace años y hoy hay cinco nuevos proyectos que están siendo financiados. Queremos avanzar en ciencia de datos e inteligencia artificial”.
Además, por primera vez en el Programa se establecieron misiones conjuntas a bases de la Antártida.
Otros desafíos son el impulso de investigaciones en temas de biodiversidad en la región Gran Chaco/Amazonia y el fortalecimiento del pacto trinacional (Argentina, Brasil y Paraguay) del Bosque Atlántico, reconocido por las Naciones Unidas como referencia de restauración forestal mundial.
Bolsonaro no tuvo en cuenta estos dos temas y la actual ministra de Ciencia del vecino país pidió a la Argentina que fueran agregados al Programa, finalizó Pombo.
(Por Diego Otondo)
Fuente Télam