El trombonista estadounidense Steve Davis, figura capaz de reunir la tradición del jazz con las nuevas corrientes, fue el encargado anoche -en dos funciones abarrotadas de público- de inaugurar el festival “Summertime 2023” en la sala porteña Bebop Club donde se integró con naturalidad a la estupenda Big Orchestra local dirigida por el trompetista Mariano Loiácono.
El par de conciertos de poco más de una hora de duración que mostraron el carácter universal del lenguaje jazzero, fueron los primeros de una serie de cuatro que se completará hoy con idénticos protagonistas en sesiones que se desarrollarán respectivamente desde las 20 y las 22.45 en la sala sita en Uriarte 1.658.
Con estas actuaciones se produjo la apertura del primer festival veraniego de jazz organizado por Bebop Club (cuya sede palermitana inauguró la formación de Loiácono en diciembre de 2021) que se extenderá hasta el 25 de febrero con una atractiva combinación de artistas visitantes y locales.
Y el debut del espacio (una audaz iniciativa que tuvo un inicio brillante) tuvo como protagonista a Davis, nacido hace 55 años en Worcester y dueño de una trayectoria que lo unió a los Jazz Messengers de Art Blakey, el sexteto Origin de Chick Corea y las bandas de Jackie McLean, Horace Silver y Freddie Hubbard, además de integrarlo a la Lincoln Center Jazz Orchestra dirigida por Wynton Marsalis.
Con esos pergaminos a cuestas en un camino iniciado en los 80, el trombonista ostenta, también, un andar solista de casi tres décadas en el que registró una veintena de álbumes, el último de ellos “Bluesthetic”, de 2022.
Sin ostentaciones pero con un pulso preciso y fresco a la vez (una mistura de sensaciones que el jazz sintetiza fenomenalmente refiriendo al swing) Davis comenzó su tercera visita a Buenos Aires (donde había tocado junto a las formaciones de Corea y Marsialis) compartiendo fecundamente con la agrupación dirigida por el inspirado artista cordobés, de 40 años.
Los recitales fueron abiertos por el conjunto donde Loiácono alista a Joaquin De Francisco (trombón), Gustavo Musso (saxo alto), Sebastian Loiácono y Mauro Ostinelli (saxo tenor), Andres Tarditti (saxo barítono), Ramiro Penovi (guitarra), Pablo Raposo (piano), Mauricio Dawid (contrabajo), y Alejandro Beelmann (batería), con una versión de “Satin Doll”, de Duke Ellington.
Con un tono más actual llegó el “Friday Blues” del propio director de la orquesta, pero la probada ductilidad del ensamble y su célebre invitado volvió a quedar expuesto en “Chelsea Bridge”, de Billy Strayhorn, y en el vibrante abordaje de “I Mean You”, de Thelonious Monk.
Enseguida Loiácono avisó que sobre el clásico “I Remember Clifford”, del saxofonista Benny Golson, había escrito un arreglo para que el rol solista corriera por cuenta del trombón de Davis y el experimento resultó una belleza capaz de disfrutar del fraseo del huésped.
Esa comunión fecunda volvió a quedar inmediatamente expuesta con el aire funky de “Song for my Love”, del propio Davis, donde también se destacó el saxo alto de Musso.
Para el tramo final del espectáculo, la privilegiada voz de Julia Moscardini (un instrumento más dentro de la paleta de la formación) se integró para la balada de Duke Ellington “I Didn’t Know About” y pasó sin tropiezos al swing con el que Django Reinhardt y Stéphane Grappelli vistieron “After You’ve Gone” donde se produjo un atractivo contrapunto de vientos entre trompeta y trombón a los respectivos mandos de Mariano y Steve.
El exquisito blues “Fine and Mellow”, compuesto e inmortalizado por
Billie Holliday, cerró un recorrido de alto vuelo por una de las músicas populares más influyentes y versátiles del mundo.
Con la orquesta ya retirándose del escenario con la satisfacción del sonar cumplido, Davis descubrió una torta con una vela en una mesa alejada a la izquierda del tablado y como para sumarse al festejo, tocó la melodía del feliz cumpleaños con su trombón, desatando nuevos aplausos entre la audiencia que se resistía a que la noche musical se clausurara.
Además del par de funciones prevista para hoy, el “Summertime 2023” continuará el sábado 21, a las 20, con Adrián Iaies Trío (junto a Carto Brandán en batería y Santi Lamisosvki en contrabajo) y esa misma noche pero desde las 22.45 y también la del viernes 3 de febrero el escenario será ocupado por Inés Estévez al frente de su cuarteto para proponer “Luxury Night”.
El jueves 9 a las 22.45 el trompetista sudafricano James McClure tocará obra propia acompañado por el terceto local integrado por la pianista Pía Hernández, la contrabajista Diana Arias y el baterista Martin Freiberg; mientras que el 10 y 11 a las 20 Pablo Ziegler, pianista argentino radicado en Nueva York, presentará composiciones y arreglos junto al teclado de la japonesa Masae Shiwa y en compañía de Walter Castro (bandoneón) y Horacio “Mono” Hurtado (contrabajo).
También el sábado 11 pero desde las 22.45 Oscar Giunta Supertrio! (#OGSt!) que el baterista comparte con Ricardo Cavalli (saxo tenor) y Jerónimo Carmona (contrabajo), tendrá el aporte del pianista sueco Mattias Nilsson.
Una noche después, a partir de las 20, será el turno del Trío Sin Tiempo, que junta al reputado pianista Leo Genovese con Mariano Otero (bajo y contrabajo) y Sergio Verdinelli (batería); y el 15 y 16 en tres funciones (dos a las 20 y otra a las 22.45 del jueves), la cantante de JJ Thames presentará “Mississippi Blues Diva”.
Otros cuatro recitales (17 y 18 a las 20 y 22.45 en cada caso) serán el territorio común del VSP Trio (Anthony Wonsey en piano, Lonnie Plaxico en contrabajo y Carmen Intorre Jr en batería) con el trompetista local Mariano Loiácono; a la vez que el cierre previsto para el 25 a las 20 será animado por Delfina Oliver Quinteto para hacer “Jazz On Broadway”.
(Por Sergio Arboleya)
Fuente Télam